Kintsugi: la clave para superar una infidelidad
- Sandra Elizalde
- 18 ene 2022
- 3 Min. de lectura
Actualizado: 25 sept

Cuando trabajo con una pareja para que ha atravesado una infidelidad, llegamos al punto en el que revisamos cómo era su relación antes de que la infidelidad se llevara a cabo. La mayoría de las parejas estaban atravesando por momentos difíciles, de alejamiento por distintos motivos; si bien hay que aclarar que ninguna situación justifica la infidelidad, parte del trabajo en terapia es entender qué pasaba. Es aquí donde empiezan a trabajarse en los puntos claves para superar una infidelidad.
La reconstrucción de la relación
¿Qué ocurría cuando sí eran felices? ¿Qué hacían cuando la pasaban bien? ¿Qué venía sucediendo cuando los dos empezaron a alejarse o a tratarse mal? Y es ahí donde trabajamos, en esa parte de la relación que no los hacía felices.
Por la educación recibida y las ideas particulares, la mayoría de las parejas vienen arrastrando problemas de comunicación. Cada uno entiende el amor y la relación de pareja de una forma particular, y es ahí donde reside el primer desacuerdo. He tenido varias parejas donde uno de ellos piensa que es suficiente y está bien la forma de comportarse y de expresar el cariño a su pareja, pero cuando le preguntamos en sesión, resulta que es de otra forma como quiere sentirse querida(o).
Identificar y trabajar en los cambios que cada uno tiene que hacer para superar una infidelidad
Esto no significa tener que cambiar drásticamente. Hay muchas cosas que las personas desconocen acerca de lo que es importante, por ejemplo: el lugar que debe ocupar mi pareja en el momento que decido comprometerme y construir juntos una familia. Ahí mi pareja pasa a ser mi prioridad, pero muchas parejas no tienen claro eso y se siguen sintiendo unidos de una manera más fuerte a su familia de origen.
Otros descubren qué hay cosas que tienen que revisar en terapia individual, por ejemplo: el haber dejado de lado todos su proyectos personales y enfocar su mundo en el otro. También hay parejas que descubren en terapia lo importante que es hablar acerca del dinero y el manejo que harán de este juntos.
Otros descubren que la manera cómo se hablan y tratan no siempre ha sido la mejor, aunque así haya visto a sus padres tratarse toda la vida y “entre ellos no era grave”. Con otras parejas revisamos el lugar de cada miembro de la familia y el rol que cada uno desempeña y descubrimos que venían ejecutando roles que no les corresponden o haciendo alianzas con un hijo excluyendo de la familia a la pareja.
Y así podría describir un sinfín de situaciones que revisamos, cada pareja es distinta y trabajamos de acuerdo a lo que necesitan. Es por eso que decimos que iniciar un proceso de terapia es hacer un traje a la medida.
Kintsugi: reparar para construir algo nuevo
Después de revisar el contexto donde ocurre la infidelidad y trabajar en ello, entonces descubren que pueden lograr una relación mas satisfactoria que la que tenían antes. Porque los dos ponen el empeño para cambiar lo necesario.
Me viene a la mente el concpeto de Kintsugi que es el arte japonés de reparar un objeto de cerámica roto con resina con oro, resultando una pieza única y hermosa. Según los japoneses, las fracturas forman parte de la historia del objeto, es por eso que las hacen evidentes al repararlas con oro. Así es también en la relación. Una infidelidad es algo que rompe, pero de los dos depende dejarlo así, o repararla de la mejor manera.

No siempre el rompimiento viene de una infidelidad, lo que si es seguro que una vez roto el jarrón o la cerámica (haciendo alusión a la técnica Japonesa) aunque se repare y se vuelvan a unir todos los pedazos de cerámica, inclusive agregando un aporte para rellenar las grietas.. el jarrón no queda igual, quizá tenga un toque de belleza, pero no es el mismo jarrón que antes de romperse.. quizá incluso por algún punto tenga filtración y por más amor que se vierta en forma de agua, esa agua terminará por fugarse y no se podrá mantener lleno de ese amor que se está vertiendo con esfuerzo en forma de agua. (Es mi pequeño aporte a este blog) Rodrig…